Es una planta que prefiere luz indirecta brillante a semisombra y requiere un riego moderado, dejando que la capa superior del suelo se seque entre riegos. Tolera niveles moderados de humedad y se beneficia de un ambiente con buena circulación de aire. Es recomendable fertilizarla con un fertilizante equilibrado para plantas de interior cada 4-6 semanas durante la primavera y el verano para promover un crecimiento saludable.